¿Cómo reacciona un entrenador cuando su equipo, uno de los más grandes del país, sigue sin encontrar el rumbo y acumula otro resultado decepcionante? La respuesta a esta pregunta se vio claramente retratada en la rueda de prensa posterior al empate 1-1 entre Emelec y Libertad FC. Jorge Célico, como un capitán que se niega a abandonar su barco en medio de la tormenta, defendió a su equipo mientras las críticas arreciaban como olas embravecidas. Pero, entre líneas, también dejó entrever una autocrítica que revela la compleja situación que atraviesa el Bombillo en este inicio de temporada 2025.

Las declaraciones que revelan la postura de Célico tras el nuevo tropiezo azul

El empate ante Libertad FC dejó al equipo eléctrico en la incómoda posición 13 de la tabla con apenas 7 puntos en 8 partidos. Un rendimiento que, para un equipo de la jerarquía de Emelec, resulta alarmante. Sin embargo, el estratega argentino mostró dos caras en sus declaraciones: por un lado, reconoció falencias; por otro, defendió el trabajo realizado hasta ahora.

«El empate es justo»: un análisis equilibrado con matices defensivos

«Me parece un partido con un tiempo para cada uno, con más opciones claras para Emelec con un dominio territorial de Libertad en el segundo tiempo en el manejo de la pelota», expresó Célico, admitiendo que su equipo no sostuvo el nivel durante todo el encuentro. Esta honestidad táctica contrastó con su firme postura al añadir: «De cualquier manera, sí tengo que decir que me parece que el empate es justo (…) la verdad es que no jugamos bien el segundo tiempo».

Lo interesante llegó cuando matizó esta declaración al afirmar: «No coincido con el profe (Juan Carlos) León. Fue un partido de un tiempo para cada uno. Libertad sí dominó en el segundo tiempo, pero creo que el empate fue justo. Ahora, tampoco creo que fueron superiores, es mi opinión.» Esta afirmación refleja cómo Célico intenta mantener la moral del equipo alta, negándose a aceptar una supuesta inferioridad ante rivales que, sobre el papel, deberían estar por debajo del potencial eléctrico.

Es como si Célico jugara un ajedrez mediático: concede una pieza (el mal segundo tiempo) para proteger su rey (la confianza del equipo y su proyecto).

Entre plancha no sancionada y lesiones: los «factores externos» según Célico

Como buscando explicaciones más allá del rendimiento puro, Célico puso sobre la mesa situaciones que, según él, condicionaron el partido: «De alguna manera hay que entender la situación del club, como las lesiones que no te las esperas. Hoy hubo un planchazo terrible, le rompió la media a Washington Corozo y ni siquiera revisaron».

La lesión de Alexander González, pieza clave en la defensa, también fue señalada como un factor determinante: «Se lesionó González y quedó demostrado que hay jugadores jóvenes de buen nivel. Es evidente que muchos deben madurar, pero lo van haciendo bien.»

Estas referencias a situaciones externas funcionan como un escudo protector ante las críticas, pero también revelan la fragilidad de un plantel que, según el propio Célico, es «corto» aunque de «buenos profesionales».

Entre la defensa férrea y la autocrítica: el mensaje dual que mantiene a Célico en el cargo

Quizás lo más revelador de las declaraciones post-partido fue la combinación de una férrea defensa del trabajo realizado hasta ahora, junto con el reconocimiento de que hay aspectos fundamentales por mejorar.

«No estamos peleando el descenso»: la defensa apasionada de Célico

Como un león que protege a sus cachorros, Célico se mostró particularmente enérgico ante las críticas que sugieren que Emelec está en crisis o luchando por no descender: «Esta historia de querer menospreciar a mi persona, a los jugadores, la vi en anteriores oportunidades. No estamos peleando el descenso, recién vamos ocho fechas y no corresponde decir eso».

Y añadió con contundencia: «Eso de querer menospreciar a este equipo lo he visto en muchas oportunidades. Mira, van 8 fechas y no es que estamos peleando descenso. Falta mucho.»

Esta postura defensiva llegó a su punto más alto cuando respondió a un periodista que sugirió que el equipo estaba estancado: «No coincido con usted», contestó firmemente, para luego elaborar una defensa de los avances que, según él, ha tenido el equipo.

Es como si Célico intentara construir un muro protector alrededor de su trabajo y sus jugadores, consciente de que la presión mediática puede desestabilizar aún más un proyecto que ya muestra fisuras evidentes.

«Estamos teniendo la incapacidad de concretar»: la autocrítica necesaria

Pero no todo fue defensa en el discurso de Célico. Como equilibrando la balanza, el argentino también mostró momentos de autocrítica que revelan una conciencia clara de lo que falla en su equipo: «No jugamos bien el segundo tiempo. Es una pena, porque ganando no pudimos salvar los 3 puntos. Me dio la sensación de que Emelec generó mucho en el primer tiempo. Estamos teniendo la incapacidad de concretar».

Esta última frase resulta especialmente significativa, pues identifica uno de los problemas crónicos del Emelec actual: la falta de eficacia ofensiva. Como un cirujano que diagnostica correctamente pero aún no encuentra el tratamiento adecuado, Célico reconoce la enfermedad pero todavía no logra curarla.

El estratega también dejó entrever optimismo mezclado con realismo al afirmar: «Me quedo con lo bueno, el primer tiempo fue bueno y el segundo nos faltó manejar mejor la pelota. Pareciera que el rival es inferior por llamarse Libertad o Manta, pero nos cuesta cada partido y tenemos que mejorar.»

El camino por delante: fe en medio de la tormenta

A pesar de los resultados adversos, Jorge Célico se muestra sorprendentemente optimista respecto al futuro: «Tengo fe que podamos meternos entre los primeros seis del torneo y reforzando el plantel vamos a estar bien en la segunda mitad del año, ahora debemos lucharla».

Esta declaración revela dos aspectos fundamentales: primero, que Célico mantiene intacta su confianza en el proyecto; y segundo, que reconoce implícitamente que el plantel actual necesita refuerzos para competir al nivel esperado.

El cierre de su intervención resume perfectamente la dualidad de su mensaje: «El equipo está bien y tenemos un plantel corto, pero de buenos jugadores. Cuando llegue fin de año, veremos cómo se termina. Acá estamos luchando para mejorar dentro de nuestras posibilidades.»

Como un navegante que promete llegar a puerto seguro a pesar de la tormenta, Célico pide paciencia y confianza, dos virtudes que escasean cuando un gigante como Emelec se encuentra en el puesto 13 de la tabla tras 8 fechas.

Lo que queda claro es que la próxima salida a Cuenca el sábado 19 de abril será otro capítulo crucial en esta historia de redención o hundimiento que está escribiendo el Bombillo en la LigaPro 2025. Como en una novela de suspenso, cada partido parece acercarnos al desenlace, pero el final sigue siendo impredecible.

Preguntas frecuentes

¿Está realmente en riesgo el puesto de Jorge Célico como entrenador de Emelec?

Aunque oficialmente la directiva no se ha pronunciado sobre una posible salida, la presión aumenta con cada resultado adverso. Sin embargo, las declaraciones de Célico sugieren que existe un entendimiento con los dirigentes sobre la situación actual del club y las limitaciones del plantel. Su referencia a posibles refuerzos para la segunda mitad del año indica que podría haber un proyecto a mediano plazo, aunque todo dependerá de los resultados inmediatos, especialmente ante Deportivo Cuenca.

¿Cuáles son los principales problemas que Emelec debe resolver según las declaraciones de Célico?

El técnico argentino identificó tres problemas principales: la falta de eficacia ofensiva («la incapacidad de concretar»), la inconsistencia en el rendimiento (buenos primeros tiempos pero malos segundos) y las limitaciones de un plantel que calificó como «corto». A esto se suman factores externos como las lesiones, que han impedido contar con jugadores clave desde el inicio del torneo.

¿Es realista la expectativa de Célico de terminar entre los seis primeros del torneo?

Considerando el rendimiento actual, parece una meta ambiciosa. Con 7 puntos en 8 fechas, Emelec necesitaría una mejoría sustancial en su rendimiento para escalar posiciones. Sin embargo, Célico basa su optimismo en la eventual consolidación del equipo con el regreso de jugadores importantes y posibles refuerzos para la segunda mitad del año. La clave estará en si el equipo puede comenzar a sumar de a tres puntos de forma consistente, algo que hasta ahora solo ha logrado hacer una vez en el torneo.