¿Por qué el embargo al estadio Capwell de Emelec podría cambiar el futuro del fútbol ecuatoriano?

¿Te imaginas que, horas antes del clásico más esperado del año, las Fuerzas Armadas embarguen partes del estadio donde se jugará el partido? Esto es exactamente lo que vive Emelec, uno de los clubes más emblemáticos de Ecuador, en medio de una batalla legal con el Instituto de Seguridad Social de las Fuerzas Armadas (ISSFA). Pero, ¿qué hay detrás de este polémico embargo? Aquí te contamos todo, desde los detalles legales hasta cómo esto podría afectar el futuro del fútbol nacional.

El conflicto legal: ¿Por qué el ISSFA actuó contra el Capwell?

La deuda que desató la tormenta

Todo comenzó con un conflicto por el alquiler del complejo Los Samanes, un centro deportivo donde Emelec entrena habitualmente. Según el ISSFA, el club tiene una deuda pendiente por el uso de estas instalaciones, lo que llevó a la entidad militar a iniciar un juicio de coactiva (un proceso para cobrar deudas mediante embargos).

El resultado: el ISSFA ordenó embargar áreas específicas del estadio Capwell, como la tribuna San Martín, parte de la general de la Avenida Quito y el campo de juego. Sí, ¡hasta el césped donde se jugará el clásico está bajo esta medida!

La defensa de Emelec: «El embargo es ilegal»

La directiva del club, liderada por Nassib Neme, no se ha quedado callada. Alegan que el procedimiento es irregular porque:

• El embargo fue autorizado por un Juzgado de Coactivas de las Fuerzas Armadas, no por un Juzgado de Inquilinato, que es el competente para casos entre entidades privadas y estatales.
• Según la ley ecuatoriana, los conflictos de alquiler entre un club privado (como Emelec) y una entidad estatal (como el ISSFA) deben resolverse en tribunales civiles, no militares.

Neme incluso ha amenazado con demandar penalmente a quienes ordenaron el embargo, calificando la acción como un «allanamiento ilegal».

Impacto en el clásico: ¿Se jugará el partido contra Barcelona?

A pesar del caos legal, Emelec asegura que el clásico del Astillero (programado para el domingo a las 17:30 locales) se disputará sin problemas. ¿Cómo es posible? Según el club, el embargo no afecta las áreas esenciales para el partido, y ya han tomado medidas legales para proteger los derechos de los aficionados.

Pero aquí hay una paradoja: aunque el campo de juego está técnicamente embargado, no hay restricciones para su uso deportivo. Es decir, el partido podría realizarse, pero cualquier ingreso económico (como venta de entradas) podría ser retenido por el ISSFA.

Conclusión: Un precedente peligroso

Este caso no es solo un problema para Emelec; es una alerta para todo el fútbol ecuatoriano. Si un tribunal militar puede embargar instalaciones de un club privado sin seguir los canales legales adecuados, ¿qué detendría acciones similares contra otros equipos? Además, plantea preguntas incómodas: ¿Hasta dónde pueden intervenir las Fuerzas Armadas en asuntos civiles?

Mientras tanto, los hinchas azules esperan que su equipo, más allá de los tribunales, brille en el campo y gane el clásico. Como dijo un aficionado en redes: «Que el fútbol hable más fuerte que los papeles».

FAQs

1. ¿Qué áreas exactas del estadio Capwell están embargadas?
   El embargo incluye la tribuna San Martín, parte de la general de la Avenida Quito y el campo de juego, pero no afecta gradas principales ni accesos.
2. ¿Puede el ISSFA cancelar el partido del clásico?
   No. El embargo no prohíbe la realización del partido, aunque sí podría intervenir en la recaudación de fondos.
3. ¿Ha habido casos similares en el fútbol ecuatoriano?
   Es inédito que un club enfrente un embargo de esta magnitud por parte de una entidad militar. Podría sentar un precedente legal crítico.