Perfil Jaime javier Ayoví corozo delantero de Emelec.

Las gambetas que realizaba Walter Ayoví en Guayaquil hace 12 años fueron el impulso final que necesitó su primo para dejar el hogar y buscar su futuro futbolístico lejos del seno familiar.

¿Cuándo llegó?

Julio Ayoví, ariete de Emelec, llegó a Guayaquil cuando solo tenía 10 años. Atrás había quedado la cancha de tierra donde marcó sus primero goles en Esmeraldas, su lugar de nacimiento el 12 de febrero de 1998.

Fue cobijado por el preparador físico Duffer Alman, quien lo recibió en su casa ubicada en la ciudadela Covien, al sur del Puerto Principal.

El goleador del torneo nacional allárecibió sus primeros consejos futbolísticos, sin dejar a un lado la educación de nivel primario y secundario, pues consiguió el título de bachiller.

Declaraciones

«Desde que llegó tuvo la ilusión de ser un jugador profesional, el hecho de verlo tranquilo no significaba que dejaba de pensar constantemente en aquello y lo combinaba con los estudios», manifestó Alman, quien lo llevó a una academia de fútbol llamada ‘Ecuatorianos Juniors’, para nutrirse de mayores conocimientos en los aspectos tácticos y técnicos.

Siete años después de perfeccionarse en el balompié y al mismo tiempo madurar poco a poco en el plano personal, Julio llegó a la Academia de Fútbol de la Escuela Superior Politécnica del Litoral (Espol) donde defendió al plantel en segunda categoría.

Más elementos

Era el momento para probar suerte en un club de primera categoría y lo hizo en Emelec. Lo llevó Alman cuando conformó el cuerpo técnico azul junto al estratega Carlos Torres Garcés, esto en el año 2006.

El internacional ecuatoriano, luego de pasar duras pruebas, fue seleccionado por su destreza y habilidad con el balón para formar parte del elenco millonario entre 70 jugadores que llegaron con la aspiración de militar en el cuadro azul.

Un joven Ayoví tuvo que pelear el puesto con los argentinos Marcos Mondaini y Luis Miguel Escalada, además del ecuatoriano Jorge Ladines. Hasta el 2008 militó en el conjunto azul donde marcó tres goles en igual número de temporadas.

Gabriel Perrone

Empezaba el 2009 y Gabriel Perrone fue contratado por ser el entrenador de Emelec. El estratega argentino no lo tenía en sus planes, por ello fue prestado al Manta, donde marcó siete conquistas. – Cuando Jaime jugó en el Manta, me contó que alguien le había pedido que nos anote un gol, pero él le dijo que en caso de hacerlo no lo iba a celebrar», señaló Rafael Candell, actual miembro de la comisión de fútbol del equipo millonario.

El presente año volvió a Emelec. A base de goles y habilitaciones, Ayoví fue obteniendo un espacio en el rol abridor de la escuadra dirigida por Jorge Sampaoli a tal punto que superó al argentino Hernán Barcos, de Liga de Quito, como máximo artillero del campeonato tras sus 23 anotaciones marcadas.

Convocatoria

La convocatoria a la selección ecuatoriana de fútbol y su permanente presencia en las redes contrarias no lo han hecho perder su sencillez. – Él es el mismo chico tranquilo y respetuoso de siempre», dice Noemí Caballero, relacionista pública de Emelec.

Hoy, entre rumores de transferencias al fútbol del exterior y su firme objetivo de lograr el título con Emelec, el ariete recuerda una de las acciones donde no pudo anotar en la primera final contra Liga en Casa Blanca.

«Me apuré. Nunca pensé que los centrales se habían chocado. Cuando había rematado me percaté que los dos estaban en el piso, después de esa jugada me quería matar, porque tenía mucho espacio para seguir».

Ayoví asegura que ya ha dejado atrás aquella desafortunada acción y solo piensa en ser campeón. – Estoy con una bronca tremenda por no haber metido en esa ocasión de gol y cuando uno tiene eso sale con mayor actitud a marcar», sostiene con optimismo el goleador azul.