En la categoría : Emelecistas
Dentro del tema : EMELEC
Autor del texto : Páginas Ecuatorianas
Fecha de publicación: 2 Jul, 2019

(Por : Paco Zambrano) A fines de 2003 tuve la oportunidad de viajar y conocer por razones de trabajo las Galápagos, acompañaba al equipo desde 1995 cuando me había ligado e involucrado como miembro de la Boca del Pozo asistiendo a todos los partidos posibles. Pero como padre de familia y desempleado como estaba, tuve que elegir el trabajo sobre la afición.

Desde 1996 estampaba camisetas para vender a los miembros de la barra, así financiaba mi afición y me permitía aportar al sustento de mis hijos, pero eran otros tiempos y esta actividad no rendía suficientemente para dedicarle el tiempo completo, lideraba un grupo de hinchas que vivíamos en la Alborada y procuramos estar siempre presentes con nuestra bandera.

emelexista emelec

empece a ir y liderar el grupo de la Alborada


Mientras asistía a la universidad fungía como reportero de borde de campo para un par de radios guayaquileñas, esto me permitió acceder gratis a la cancha algunas veces, pero siempre terminaba trepando las mallas y uniéndome a la barra que lideraba Giuseppe Cavanna, por mis labores como «periodista» de medio tiempo y con el apoyo de Cavanna, pude acceder a los jugadores y protagonizar episodios de la historia informal del club «nos metimos por la ventana».
emelexista emelec

carlos alberto juarez


En la foto de 1998 aparece el letrero que contaba los goles que anotaba Kaviedes y dejamos marcando un récord mundial, y a nivel nacional sigue imbatible.

Regalando camisetas a los jugadores me convertí en amigo de casi todos y cábala para algunos goleadores que me pedían camisetas para mostrar al anotar, entre ellos Tony Moreira, Otelino Tenorio y el que más fe me tenía Carlos Alberto Juárez Devico.

Todo por el Bombillo

Me titule en 2002 como doctor en medicina veterinaria y empecé a laborar en mi campo profesional, aprovechando ciertas libertades y comodidades que mis labores me permitían, (tener vehículo y trabajar en el campo) para continuar acompañando al equipo en todas las canchas.

A mediados de 2003 por razones de recorte de personal en la empresa donde laboraba, me quede sin empleo y me sostuve exclusivamente de la venta de camisetas, ayudó la popularidad de la frase «Tiemblen XQ Volví!» más que los resultados del equipo, que entró a la liguilla con las justas.

Debo aclarar que mi primer contrato para poder acceder a la residencia fue como editor de una revista deportiva, avalado por mi experiencia en el ámbito del diseño, impresión e información logrado siguiendo a EMELEC.

Cuando llegué a las Islas me enamoré de la paz, quietud de sus calles de tierra, pero sin basura, extrañaba eso sí a mis hijos y al estadio! Durante mi primer año, de labores 2004 a 2005 vi unos cuantos partidos por tv, los que los canales locales permitían, porque no llegaban todos. Acompañado de uno o dos hinchas ocasionales y fui identificando a algunos para proponerles juntarnos y ver los juegos de EMELEC juntos, esto último fue bastante difícil precisamente por no tener garantías sobre la transmisión de los partidos.

Fuera del continente

Regresé al Capwell en 2005 por unos meses hasta que me ofrecieron otra oportunidad de trabajo en las Islas, esta vez como veterinario y me tocó regresar para asesorar una granja, esta vez me aseguré de reclutar hinchas y asegurar un restaurante propiedad de uno de ellos donde veíamos los partidos. Por esa época apliqué para ser inspector de cuarentena para las islas y logré el puesto pero me tocó desempeñar mi labor desde Guayaquil dado que no tenía carnet de residente permanente, a estas alturas tenía una novia local pero no una relación formal que permitiera acceder a dicho documento, de modo que me tocó regresar y estar nuevamente en la barra, esta vez más de cerca apoyando y acompañando a Giuseppe como su segundo hasta 2007, vivimos la inauguración de la platea de la. Av. Quito, estableciendo el récord nacional de ruido en un estadio, lo cual lo logramos CANTANDO y en un clásico donde por supuesto la barra contraria estaba muda.

A estas alturas mi relación sentimental con mi actual pareja había sido formalizada para poder acceder a los documentos que me permitieran residencia en las islas, encantado por las características especiales de esta tierra volví a mudarme, no sin antes anunciar a Giuseppe mi intención de formar una filial de la barra en las islas y dejar presentando con Giuseppe a alguien que se encargara. De apoyarlo, coordinar acciones y más labores que ayudaron a crecer a nuestra querido barra Federico Rabascall a quien aprovecho para felicitar por su labor y sacrificio en estas líneas.

Esta vez viaje con la convicción de juntar más AZULES a mi locura de ver los partidos a distancia, pero cantando al menos en voz bajita.

Primeros integrantes

Desde 2008 hasta 2010 fueron malos años para este propósito, a pesar de hacerme conocer como hincha ENFERMO* ( *Enfermedad de la que no existe cura, y de la que moriré orgulloso» Dr. Moisés Botta ) eran pocos los que se sabían las canciones o se prestaban para acompañarme en esa locura y debo mencionar a David Anaguano un jovencito local que cuando viajaba al continente se unía a la barra como el único que al igual que yo, cantaba y tarareaba los ritmos de la barra mientras veíamos los partidos sin importar los resultados.

Ya en 2010 habiendo llegado al subcampeonato, otros hinchas se juntaron y empezamos a reconocernos como los «más fieles» pero sin organizarnos en absoluto.

Éramos Jaime Castillo, Kenny Bermúdez, Jorge Paredes, Danilo Cadena, Jonathan Vega, David y Jonathan Anaguano, en el bar de Fabricio Chuquimarca los primeros miembros de la informal Boca del Pozo Galápagos .

Financiamiento de la barra

En el 2011 uno de los «fieles» Jorge Paredes, propuso hacer una «vaca» y comprar un bombo para meterle ritmo a los cánticos lo cual concretamos para el año 2012, Jorge aportó de su bolsillo y se compró un tambor de repique, posteriormente una trompeta (que jamás aprendió a tocar y un redoblante)
Con estos instrumentos nos convertimos oficialmente en la banda del chavo, tocábamos horrible pero cantábamos sin parar y el bar empezó a llenarse de AZULES que reconocían el lugar como el sitio para ver el fútbol en ambiente de fiesta.

Entre 2011 y 2012, crecimos en cantidad, pero sin lograr el título, el 2013 llegamos al campeonato, pero hubo cierto resentimiento porque el bar permitía el ingreso de personas de otros equipos que aprovechaban los malos resultados para gozarnos, de modo que opté para el 2014 por ver los partidos en casa solo «los fieles» y empezamos a programar actividades para reunirnos y fortalecernos, peloteos, comidas, ensayos de la banda para ir aprendiendo a tocar.

¿En dónde queda?

Al final vimos los partidos turnándonos en las casas de los miembros de la barra cuando se venían partidos importantes o clásicos coordinábamos el uso de locales que pertenecían a amigos AZULES y que garantizaran la exclusividad para nuestra hinchada, estuvimos en algunos restaurantes y bares y ese año antes de quedarnos por situación de lujo y comodidad en el bar PELICAN VIEW de los hermanos Verónica y Nelson Loor (Terraza frente al mar) lugar donde disfrutamos el bicampeonato.

Para inicios de 2015 nombraron a una comisaría de policía del equipo contrario que nos declaró la guerra, clausurando por una semana el local donde veíamos el fútbol por expender bebidas alcohólicas en domingo, para no perjudicar a nuestro amigo nos mudamos al restaurante «El pez volador» de Freddy Duplaa, donde podía vender cerveza junto a la comida y así logramos evadir la persecución de la funcionaria y la policía celebrando el tricampeonato, luego de esta vuelta y a instancias de un nuevo miembro: Renan Zambrano recientemente llegado de Cuba donde había cursado una maestría, se decidió escoger una directiva y por medio de esta gestionar donaciones u otros trámites.

Presidente de la Barra

Me escogieron para presidir el grupo y más que nada organizar la manera de ver los partidos dado que se anunciaba la venta de los derechos de transmisión y debíamos contratar el servicio de cable que nos garantizara esto, nos impusimos cuotas para adquirir una antena satelital y fue así como pudimos acceder al campeonato en el local de Duplaa, durante el 2016 y casi todo el año 2017, así hubiéramos continuado, pero amenazaron al propietario con clausura por el escándalo de nuestra banda, fruto de la gestión directiva habíamos incrementado los instrumentos y realmente se nos escuchaba a cuadras de distancia.

Nos tocó dejar de usar los tambores para seguir usando el local hasta que Jorge Paredes convenció a su papá de prestarnos un cuarto grande que usaban de bodega y que había sido alguna vez una imprenta donde laboraba un tío ya fallecido, hicimos la minga de limpieza, desde un local privado evadimos la persecución y posible clausura, trasladamos los equipos de transmisión y conseguimos prestado un proyector, de esta manera en noviembre de 2017 en un clásico que ganamos 3 a 0 inauguramos la sede con pantalla de proyección. Sillas remendadas, recicladas, tablones sobre chancletas de colas y sin instalación eléctrica.

En esta sede celebramos el campeonato 2017

Creemos ser los primeros en tener una sede AZUL.
Ha sido una experiencia de sobrevivir a la presión y circunstancias adversas, amor por el equipo y compartir momentos malos y buenos.

Los miembros nos impusimos cuotas extraordinarias para adecentar piso y paredes, instalar electricidad, comprar proyector propio, reparar e incrementar instrumentos, colocar aire acondicionado, refrigeradora y demás comodidades que los AZULES merecemos y hoy ponemos al servicio de la hinchada AZUL que desee visitarnos.

Agradecimientos a los miembros que siguen y a los que se han sumado para apoyar esta iniciativa:
Carlos Granja, Jaime Mera, Oswaldo Villón, Efrain Redrovan, Beto Zambrano, Nick Pacheco, Lorena Veliz, Patricio Táez, Andrea Brito, Adrián Morales, Verónica Prado, Saúl Vizuete, José Rueda, Jonathan Gómez y más que mi memoria traicionera no me permite incluir en este momento.

0 comentarios